jueves, 28 de julio de 2011


Receta de gazpacho frío de melón con yogur




Dificultad: Fácil
Tiempo: 50 min. a 1 hora





Ingredientes (4 personas)

1 melón.
½ pimiento verde.
½ cebolleta fresca.
1 diente de ajo.
½ yogurt natural.
4 cucharadas de aceite de oliva extra virgen.
1 cucharada de vinagre de manzana.
Sal


Cómo se elabora:

Pelamos y troceamos el pimiento verde, la cebolleta fresca, el diente de ajo y el melón. Con una batidora trituramos todo el conjunto.
Agregamos el medio yogurt, el aceite de oliva, ponemos a punto de sal y volvemos a triturar.
Introducimos en el frigorífico tapado por espacio de ½ hora.
En el último momento, cuando vayamos a consumirlo, agregamos el vinagre de manzana, mezclamos de nuevo con ayuda de la batidora y servimos en copas frías acompañando de unas bolitas de melón y un poco de pimiento verde y rojo muy picadito por encima de este refrescante gazpacho.
Si nos quedase espeso para nuestro gusto podemos, antes de añadir el vinagre y la sal, agregar agua fría lentamente, sin dejar de batir hasta conseguir la textura deseada.
Por otro lado si nos pasásemos con el agua y nos quedase excesivamente liquida, agregamos miga de pan batiendo continuamente hasta conseguir la textura deseada.


Comentario dietético

Este refrescante y sabroso entrante permite incorporar frutas y hortalizas de temporada como es el caso del melón y los pimientos verdes. La base de la receta es el melón, que desde la óptica nutricional va a convertir la receta en un plato muy nutritivo, saciante por su cantidad de agua y fibra, y con apenas calorías. El aliño de aceite es la parte más energética de la receta, y si gusta el sabor natural de la mezcla de alimentos, incluso se puede prescindir de él. El melón es junto con la sandía, la fruta que más agua concentra; prácticamente el 90% de su peso es agua. En caso de alergia a la caseína se puede prescindir del yogur y hacer el gazpacho de melón exclusivamente con vegetales.



Enfermedades para las que está recomendado


Ácido úrico y gota
Afecciones de la piel
Alergia al huevo
Alergia al pescado
Alteraciones por estrés
Anemia ferropénica (carencia de hierro)
Anemia perniciosa (carencia de vitamina B12)
Anemia por carencia de ácido fólico
Cálculos en la vesícula biliar
Cálculos renales
Diabetes mellitus
Enfermedades degenerativas (parkinson y otras)
Estreñimiento
Gastritis
Hipertensión arterial
Hipertrigliceridemia (Triglicéridos elevados)
Intolerancia a la lactosa
Intolerancia al gluten
Meteorismo (Flatulencia)
Obesidad
Osteoporosis
Úlcera péptica


Enfermedades para las que no está recomendada


Alergia a la caseína
Diarrea

jueves, 7 de julio de 2011

Aciertos y errores alimentarios en los "reality shows" con personas obesas




Los consejos que pueden darse en programas de tele-realidad relacionados con la obesidad son muy diversos, algunos son adecuados pero otros resultan contraproducentes para la salud

La actual incidencia del sobrepeso y obesidad, que en nuestro tiempo afectan a más de la mitad de la población adulta en las sociedades desarrolladas, ha propiciado el auge de programas de estilo "reality show", con los más variopintos planteamientos.
En ellos, los participantes o concursantes (condición variable en función del espacio) se seleccionan en virtud de determinados trastornos patológicos relacionados con su peso.
A menudo por exceso, pero en algunos casos, también por defecto (anorexia nerviosa). En estos programas, una audiencia que tiene la oportunidad de tomar ejemplo de las situaciones planteadas en pantalla observa a los participantes y, llegado el caso, sigue los consejos que se han propuesto en antena.
En ocasiones, el mensaje que recibe es, en cierta medida, acorde con las recomendaciones de la comunidad científica al abordar este tipo de problemas. Cuando sucede así, se fomenta que la audiencia se incline hacia un estilo de vida dinámico en relación con la práctica de actividad física y, también, a seguir un patrón dietético en línea con sus necesidades. Sin embargo, en otros programas, las cuestiones relacionadas con el peso (ya sea por exceso o por defecto) se abordan con un prisma utilitarista que se ajusta más a los índices de audiencia que a otras cuestiones.
El resultado en estos casos no solo es de escasa utilidad pública, sino que además puede ser contraproducente para la salud al abordar este tipo de problemas.


Distintos planteamientos

El carácter de los espacios, dirigidos bien hacia la utilidad pública o bien hacia el logro de la máxima audiencia, marca la diferencia en el tipo de mensajes
Determinadas productoras de televisión explotan el filón de la obesidad mediante la realización de programas cuyo tema central son las cuestiones relacionadas con el peso de los participantes. Aunque en el espectro de la radiodifusión española aún son pocos los espacios donde se emiten este tipo de programas, en el mundo anglosajón están en pleno apogeo.
No obstante, las actuales posibilidades tecnológicas (a partir de canales de televisión por cable o mediante Internet) facilitan que muchos de ellos sean accesibles para una buena parte de la población, en especial, para quienes están interesados en el tema.

A pesar de la oferta variada, en esencia, se distinguen dos grandes grupos de patrones que resumen la filosofía de estos programas:

Espacios en los que la salud, la alimentación, la cocina y sus aspectos relacionados (compra y conservación de los alimentos, etc.), el ejercicio, la actitud, la motivación, el papel de las terapias alternativas como el yoga u otras formas de manejo del estrés, y otros temas educativos, son el hilo conductor de la intervención y se someten a debate. En líneas generales, estos programas abordan la cuestión del exceso de peso desde un punto de vista similar al del coaching.
En ellos los participantes reciben asesoramiento y consejo de un variado equipo de especialistas (dietistas-nutricionistas, entrenadores personales, médicos, etc.) con quienes conseguir sus metas. Apenas hay confrontación entre los participantes, no rivalizan y rara vez consiguen premios, ya que no hay "ganadores".

Espacios que sin ninguna o con escasa voluntad intervencionista someten a los participantes a observación (de estilo "Gran Hermano"), al tiempo que se les obliga a la realización de pruebas y se les plantean situaciones comprometedoras. Programas, en definitiva, caracterizados por su banalidad, escasa calidad educativa y por obviar los más mínimos estándares de respeto hacia unos valores esenciales, donde lo único que parece importar es la proporción de audiencia que en ese momento sigue el espacio o "share". En ellos es frecuente que los concursantes compitan entre sí y que haya ganadores, expulsados, etc.


Buenos ejemplos

En la primera categoría se podría catalogar el programa de la MTV "Ya no estoy gordo" ("Fat no more", en su versión original), donde destacan las siguientes características: los participantes son en esencia jóvenes de ambos sexos con un grado de obesidad importante, a quienes se reeduca durante un verano (más o menos 110 días) en nuevos y mejores hábitos relacionados con su estilo de alimentación y de actividad física.
En líneas generales, un especialista en deporte y alimentación toma las riendas de cada caso y, de forma individualizada, analiza el estilo de vida que ha propiciado el particular estado ponderal del participante y le ayuda a reconducirlo. En resumen, se centra en las cuestiones más importantes que han de constar en todo abordaje racional de la intervención para adelgazar:


Tomar conciencia de los errores en cuanto a alimentación y ejercicio.

Aportar nuevas herramientas y soluciones.
Consolidar los resultados obtenidos, con el fin de que el participante sea autosuficiente una vez que carezca de la influencia del profesional.
Los buenos consejos muestran planteamientos de cambio vital hacia estilos de vida saludables y perdurables en el tiempo
Otro programa destacado es "X-weighted families" ("Familias extrapesadas"), de la televisión canadiense.
En él se relata la transformación hacia unos estilos de vida más saludables de un grupo de familias que intentan superar la pereza que les provocan sus aspiraciones para mejorar su peso.
Durante varios episodios de una hora de duración, se relatan las dificultades y los apuros de familias que han decidido cambiar sus costumbres. También se hace especial hincapié en la situación de los hijos y la educación que reciben: las horas frente al televisor o con los videojuegos, su alimentación deficiente con demasiadas situaciones de bufé libre, abuso de la bollería y de las chucherías, grasas saturadas y la ausencia de motivación para realizar ejercicio físico de forma regular.

Uno de los mensajes más positivos de este programa es su lema, que con un explícito "¡Adelgacemos juntos!", asume la importancia de adelgazar en compañía. Y es que además de las dificultades propias del momento de adelgazar, con frecuencia se suma el hecho de que el entorno (familia, amigos, etc.) no "acompañe" pese a poder necesitarlo tanto o más que el propio interesado.

Otros ejemplos de este tipo de programas, menos destacados si se atiende a su éxito en pantalla, son "Cuestión de peso", emitido en 2009 por Antena 3, o "Weighing In" ("Dentro del peso") del canal Food Network, con notables diferencias entre ambos en cuanto al planteamiento del concepto de origen, pero que aportaron buenos consejos en su día, lejos de absurdos concursos y con un mensaje claro centrado en los hábitos de vida saludable mantenidos en el tiempo.


En resumen, este tipo de espacios centran su atención en dar consejos referentes a:

1.   Cuidar los ingredientes de la dieta.
2.   Prestar atención a la importancia de la cocina.
3.   Fomentar estilos de vida activos y la práctica regular de actividad física.
4.   Poner en relieve la publicidad de determinados alimentos como elemento condicionante de desequilibrios dietéticos.
5.   Incidir en la importancia de los hábitos mantenidos a lo largo del tiempo, más que en asumir estrategias puntuales.
6.   Atribuir a la pérdida de peso un ritmo adecuado alejado de los estilos de adelgazamientos en tiempo récord.
7.   Asumir los cambios en comunidad (familia, amigos, etc.) más que en afrontarlos de forma aislada.


Ejemplos algo más que cuestionables

En el tratamiento de la obesidad a largo plazo, la competitividad, la ridiculización y las recompensas económicas no son un buen aliciente





En el extremo opuesto en cuanto a programas de tele-realidad figuran espacios en los que el concurso y la rivalidad entre los participantes es la tónica general. Quizá el ejemplo más patente de esta situación sea "Supersize vs Superskinny" ("Supergordos frente a superdelgados") de Channel 4, en Reino Unido.
En él se confrontan las experiencias de dos grupos, uno conformado por concursantes con obesidad mórbida y otro compuesto por personas con anorexia nerviosa, a quienes se propone que compartan sus experiencias, e incluso, que sigan algunas dietas milagro que se pueden hallar en Internet.

Además, se hace promoción de la liposucción como remedio contra la obesidad y se recomienda el seguimiento de peligrosas estrategias, como la diabulimia, para perder peso.

Otros espacios de dudosa utilidad práctica son "The biggest loser" ("El mayor perdedor", de peso), de la NBC, y "Dance your ass off" ("Mueve el trasero"), de Oxygen, ambos estadounidenses. El primero se emite desde 2004 y ha cumplido ya nueve temporadas con un notable éxito de audiencia.
En un formato parecido en gran medida al del conocido "Gran Hermano", se le achaca que tenga un espíritu demasiado competitivo y se critica porque, en ocasiones, convierte el problema de la obesidad en un espectáculo de masas. En el segundo concurso, los parámetros para ganar radican en las pérdidas de peso conseguidas por los participantes y en su habilidad para bailar. En algunos países, se retiró su emisión debido a las polémicas, fruto de las humillaciones de concursantes pertenecientes a minorías étnicas.


En sentido contrario al de los anteriores programas mencionados este tipo de espacios centran su atención:

Más en las audiencias que en el interés real por solucionar los problemas tratados.
En la absurda fascinación del morbo de ver a personas preocupadas por su situación ponderal enfrentados ante retos poco edificantes.
En la promoción de estrategias peligrosas como la de la diabulimia y el seguimiento de dietas milagro.


Obesidad en la televisión: Lejos de la realidad.

Uno de los aspectos más criticados de este tipo de programas es el modo en que se abordan todos los casos, alejado de las condiciones reales. Pocas personas tienen un dietista-nutricionista, un médico, un cocinero o un entrenador personal a su disposición las 24 horas del día, durante dos o tres meses. Incluso, se libera o se ayuda a los participantes con sus cargas familiares, profesionales, etc. mientras dura la grabación, unas situaciones que dotan a la intervención de una artificialidad que no se da en la vida real.
Además, en el caso de los programas con formato de concurso, la posibilidad de ganar jugosas recompensas económicas puede promover unos cambios carentes del convencimiento necesario para que se mantengan en el tiempo. Una vez desaparecida "la zanahoria" del premio, es muy probable que los concursantes vuelvan a sus costumbres anteriores.
REGLAMENTACION SOBRE LOS REFRESCOS






Una nueva norma regula los aspectos técnicos y sanitarios de las bebidas refrescantes y obliga a que los refrescos de frutas indiquen la cantidad de zumo que contienen

Se ha publicado el Real Decreto 650/2011, (Ver: http://www.boe.es/boe/dias/2011/05/19/pdfs/BOE-A-2011-8687.pdf) por el que se aprueba la reglamentación técnico-sanitaria en materia de bebidas refrescantes, que ya se encuentra en vigor.

Esta nueva norma para bebidas refrescantes sustituye a la anterior reglamentación técnico-sanitaria para la elaboración, circulación y venta del año 1992, a la vez que establece tanto su definición y composición como las reglas que se deben seguir en su elaboración, importación, almacenamiento y comercialización para adecuarlas a la normativa comunitaria.
Mediante la misma se pretende, según se aclara en el propio texto, adaptar esta materia a la legislación horizontal, tanto en lo relativo a los aditivos como al etiquetado, presentación y publicidad de los productos alimenticios.

Los refrescos no son un producto considerado de riesgo sanitario y raras veces están implicados en brotes alimentarios. Pero para valorar sus posibles peligros y su seguridad de consumo deben respetarse unas condiciones básicas, como la calidad higiénico-sanitaria del agua utilizada, los ingredientes (sobre todo aditivos) que deberán permitirse para su uso alimentario, la naturaleza de los envases y unas Buenas Prácticas de Fabricación.
Son los propios fabricantes quienes recomiendan, además, su conservación en un lugar limpio, fresco y seco, protegidos de la luz solar directa y alejados de olores agresivos. Tampoco es aconsejable su almacenamiento en contacto directo con el suelo. En ocasiones, si así lo aconseja el fabricante, deberán refrigerarse.


Qué contienen y cómo se envasan

La nueva reglamentación higiénico-sanitaria, aprobada mediante Real Decreto, comienza por determinar qué son bebidas refrescantes.

Deroga el real decreto de 1992 que hasta ahora regulaba estos productos (RD 15/1992).

Las define como "bebidas analcohólicas, (sin alcohol) carbonatadas o no, preparadas con agua de consumo humano, aguas preparadas, agua mineral natural o de manantial, que contengan uno o más de los siguientes ingredientes: anhídrido carbónico, azúcares, zumos, purés, disgregados de frutas y/o vegetales, extractos vegetales, vitaminas y minerales, aromas, aditivos autorizados u otros ingredientes alimenticios".

En las bebidas refrescantes de zumo de frutas deberá señalarse el porcentaje de zumo que contienen
También establece que las bebidas refrescantes se dividen en agua de seltz, de soda, aromatizada, gaseosa y otras bebidas refrescantes, entre ellas, las bebidas de zumos de frutas, de extractos, mixtas, bebidas refrescantes para diluir productos sólidos para la preparación de bebidas refrescantes o aromatizadas.
Se dividen en:

·         Agua de seltz
·         Agua de soda
·         Agua aromatizada
·         Gaseosa
·         Otras bebidas refrescantes, entre las que se encuentran las siguientes: bebidas refrescantes de zumos de frutas, de extractos, mixtas, bebidas refrescantes para diluir productos sólidos para la preparación de bebidas refrescantes, o bebidas refrescantes aromatizadas.

Las define como "bebidas analcohólicas, (sin alcohol) carbonatadas o no, preparadas con agua de consumo humano, aguas preparadas, agua mineral natural o de manantial, que contengan uno o más de los siguientes ingredientes: anhídrido carbónico, azúcares, zumos, purés, disgregados de frutas y/o vegetales, extractos vegetales, vitaminas y minerales, aromas, aditivos autorizados u otros ingredientes alimenticios".

En las bebidas refrescantes de zumo de frutas deberá señalarse el porcentaje de zumo que contienen
También establece que las bebidas refrescantes se dividen en agua de seltz, de soda, aromatizada, gaseosa y otras bebidas refrescantes, entre ellas, las bebidas de zumos de frutas, de extractos, mixtas, bebidas refrescantes para diluir productos sólidos para la preparación de bebidas refrescantes o aromatizadas.

En cuanto a la composición de las bebidas, la norma determina que podrán contener agua de consumo humano, preparada, mineral natural o de manantial, anhídrido carbónico, azúcares, zumos, purés, disgregados de frutas o de vegetales o sus mezclas, jarabe compuesto o preparado básico, extractos de frutas, de vegetales o de ambos, cafeína y quinina, aditivos y aromas autorizados, vitaminas y minerales, y otros ingredientes utilizados en alimentación humana o autorizados de conformidad con el Reglamento (CE) Nº 258/97, sobre nuevos alimentos y nuevos ingredientes alimentarios.

En lo relativo al envasado, el texto establece que los envases podrán ser reutilizables o no y, en todo caso, deberá garantizarse el cumplimiento de los requisitos de seguridad alimentaria.
Por último, respecto al etiquetado, la reglamentación aprobada recuerda que deberá cumplir lo dispuesto en las diferentes normas vigentes y añade que en las bebidas refrescantes de zumo de frutas deberá señalarse, además, el porcentaje de zumo que contienen, punto este novedoso respecto a la anterior norma.


Mayor protección

Hasta ahora, los requisitos sanitarios para las bebidas refrescantes se regulaban en el Real Decreto 15/1992, por el que se aprueba la reglamentación técnico-sanitaria para la elaboración, circulación y venta de bebidas refrescantes.
Esta norma debía revisarse desde el punto de vista de la seguridad alimentaria, sobre todo, desde la aprobación del Reglamento (CE) n.º 178/2002 del Parlamento Europeo y del Consejo, que establece los principios y los requisitos generales de la legislación alimentaria, crea la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria y fija procedimientos sobre seguridad alimentaria, y del Reglamento (CE) n.º 852/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo, relativo a la higiene de los productos alimenticios.

El nuevo enfoque legislativo adoptado por la Unión Europea ha establecido, entre otras, normas y procedimientos respecto a la responsabilidad de los fabricantes y de las autoridades competentes, los requisitos estructurales, operativos e higiénicos para los establecimientos y los requisitos para la producción, almacenamiento y transporte de alimentos con carácter general.


Los refrescos

Utilizados desde la antigüedad, los refrescos tienen una larga historia vinculada a las diferentes culturas y civilizaciones.
El agua de regaliz ya se utilizó como bebida refrescante por los antiguos egipcios, o el zumo diluido de chufa, la horchata, se usó como bebida medicinal por los antiguos árabes y se introdujo en el Mediterráneo hace más de 1.300 años.
El agua de tónica, con una larga historia, se elaboraba de forma tradicional a partir de la quinina, una sustancia medicinal extraída de un árbol de Perú.
Más reciente es la historia de los madrileños del siglo XIX que bebían, entre otras cosas, agua de cebada bien fría para refrescarse, mientras que al otro lado del océano, un farmacéutico de Atlanta desarrollaba un tónico medicinal que más tarde se convertiría en el refresco mundial por excelencia y que abriría las puertas hacia la industria de las bebidas refrescantes.
Los refrescos forman un conjunto muy numeroso de productos cuyo consumo ha experimentado un fuerte crecimiento a lo largo de las últimas décadas debido, en gran medida, al desarrollo de su producción industrial. Por otra parte, han experimentado transformaciones sustanciales, no solo en cuanto a su composición, sino también en lo relativo a su diseño y presentación, y constituyen hoy en día un grupo muy diverso en el que se incluyen una gran variedad de bebidas.
En los países desarrollados, los refrescos suponen una parte muy importante del líquido ingerido. Sin embargo, los expertos en nutrición advierten de que estas bebidas no deben sustituir al agua en la dieta. Prueba de ello es que en tan solo el primer trimestre de 2011 se consumieron en España 650 millones de litros, lo que supone un incremento de alrededor del 5% con respecto al mismo periodo del año anterior. En cuanto a las preferencias, las bebidas con cola ocupan el primer lugar en el consumo español, seguidas por los refrescos de naranja y de limón, en segundo y tercer lugar, y por las tónicas, que ocupan la cuarta posición.
Aunque el consumo más elevado corresponde a estos refrescos tradicionales, el mayor crecimiento del consumo se registra en productos menos habituales, como las bebidas sin gas y sin azúcares. La reducción o eliminación del contenido de azúcar parece ser una de las tendencias del mercado. El sabor dulzón siempre ha sido uno de los gustos básicos de los refrescos, pero la creciente utilización de combinaciones de edulcorantes sintéticos sin calorías supone una clara corriente. También las denominadas bebidas energéticas y para deportistas alcanzan una gran demanda.


Para consultar:

Página oficial de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición:
Smoothie




Un smoothie (del inglés smooth: suave) es un batido de fruta comercializado con esta nombre.
Es una bebida cremosa no alcohólica preparada a base de trozos y zumos de fruta, concentrados o congelados, mezclados tradicionalmente con productos lácteos y hielo o helado.


Características

Suele tener una consistencia algo densa, y su consistencia es parecida a un batido pero algo más espeso.
Se diferencia principalmente del resto de productos del mismo sector por su cremosidad.
Se le suele añadir leche, leche de soja o bien yogur natural para enriquecerlo en proteínas.

Los smoothies industriales contienen trocitos triturados o licuados de varias frutas, a los que se añaden diversos zumos elaborados con deshidrataciones o concentrados, pudiendo algunos ser naturales
No tiene aditivos que modifiquen su aspecto o su sabor, pero contiene a menudo vitaminas añadidas para compensar la carencia en vitaminas naturales. La mezcla triturada se conserva mediante pasteurización.

El auténtico smoothie se elabora a base de una mezcla de frutas frescas o congeladas, trituradas o licuadas en el momento de consumirla.
Tradicionalmente, en Estados Unidos, el smoothie se consumía mezclado con hielo picado, por lo que era parecido a un granizado natural, pero más cremoso, de ahí su nombre.

Una recomendación para reconocer un verdadero smoothie es que no estén comercializados en envases tetra brik o tetra pack, vidrio o metal, ya que significa que han pasado por un proceso de concentración y evaporización del agua mediante calor, proceso que disminuye rápida y progresivamente las vitaminas que pueda contener. También es importante observar los ingredientes, puesto que se elaboran con numerosos productos alternativos como pulpa, purés, néctares y otros aditivos.


¿Un producto «natural»?

Los smoothies son promocionados como una bebida con nutrientes beneficiosos para la salud, elaborada con fruta natural que aporta una gran cantidad energética.
Su principal característica serían las vitaminas que contienen y que son bajos en calorías. Para garantizar el valor energético que puede aportar un smoothie sería imprescindible que éstos fueran cien por cien «naturales», sin aditivos.

La OCU, Organización de Consumidores y Usuarios, ha realizado un estudio de los productos comercializados como smoothies, cuyo resultado fue publicado en febrero de 2009.
La organización avisa de que su consumo no equivale al de fruta fresca.
Los análisis de los smoothies ofrecidos por marcas comerciales demuestran que éstas aseguran que el producto equivale a una ración de fruta fresca cuando en realidad no alcanza cantidades mínimas de nutrientes tan característicos de la fruta fresca como la fibra y el ácido fólico.
A parte de los numerosos ingredientes no naturales presentes en la composición de los smoothies, se comprobó que los procesos de elaboración de estos productos implican unas mermas importantes de los nutrientes de las frutas de origen. Resultan además más caros que la fruta fresca.


Historia

El smoothie proviene de la tradición de tomar mezclas de fruta fresca batida, en los países tropicales de América Latina.
Esta tradición ancestral pasó a Estados Unidos donde rápidamente se puso de moda.

El concepto nació en California en los años 1960 junto a un boom de gente que sentía la necesidad del cuidado personal y los gimnasios, las bebidas energéticas y bajas en calorías y grasas.
Productos que tuvieron gran auge durante esta época fueron todas las bebidas ‘light’, naturales y orgánicas.
Los smoothies fueron una alternativa energética y vitamínica a las bebidas artificiales o los refrescos.
El smoothie se popularizó a finales de 1960 en Estados Unidos a través de las tiendas especializadas de productos naturales (ecotiendas, biotiendas y herbolarios) y los vendedores de helados como bebida refrescante.

Poco a poco las empresas, los supermercados, pequeños comercios de la alimentación…se han unido a la nueva moda, los fueron comercializando envasados, a medida que crecía la demanda de productos naturales por consumidores preocupados por la salud. Como consecuencia de esto cada vez se añaden nuevas e innovadoras ideas, y otras que no lo son tanto.

Así que en la actualidad van pasteurizados con un tratamiento de conservación térmico disminuyendo el contenido en vitaminas, algo que baja la calidad del producto considerablemente.

Asi que recomendamos lo siguiente, su elaboración en casa!







Smoothie para desayuno


Ingredientes:

1 plátano
2 cucharadas de yogur natural desnatado
2 cucharadas de muesli
3 manzanas


Cómo hacerlo paso a paso:

Pelar las manzanas y el plátano
Trocear la fruta
Con los trozos de manzana hacer un zumo con la batidora
Poner el zumo en la licuadora, junto con el resto de los ingredientes
Licuar, servir y disfrutar


Consejos y trucos:

Si no tienes aparato para hacer zumos, se puede rallar la manzana y luego licuar con el resto de los ingredientes


Smoothie de fresa


Ingredientes:

1/2 litro de leche
6 fresas pequeñas
1/2 taza de helado de vainilla
Azúcar al gusto
2 cubitos de hielo


Cómo hacerlo paso a paso:

Se pone en la licuadora la leche, las fresas y se licua durante 1minuto para integrar los ingredientes
Agrega el helado, el azúcar y los cubos de hielo.
Se licúa hasta que quede espumoso




Smoothie de frutas variadas


Ingredientes

150 gr piña (una rodaja gruesa)
3 albaricoques
10 fresas
1 plátano
2 vasos de agua
1 cucharada de leche en polvo


Cómo hacerlo paso a paso:

Se lava y se trocea toda la fruta (se quitan los huesos de los albaricoques)
Se pone toda la fruta en la licuadora y se licua durante unos segundos, hasta que estén todos los ingredientes muy mezclados
Se pone en la nevera durante media hora

martes, 5 de julio de 2011


Escherichia coli y salud natural





¿Qué es el E. coli?

La Escherichia coli, también conocida por la abreviación de su nombre, E. coli, es quizás el organismo procariota más estudiado por el ser humano.
Se trata de una bacteria que se encuentra generalmente en los intestinos animales, y por ende en las aguas negras. Fue descrita por primera vez en 1885 por Theodore von Escherich, bacteriólogo alemán, quien la denominó Bacterium coli. Posteriormente la taxonomía le adjudicó el nombre de Escherichia coli, en honor a su descubridor.
Ésta y otras bacterias (siempre que no haya sido modificadas geneticamente) son necesarias para el funcionamiento correcto del proceso digestivo, además de producir las vitaminas B y K.
Es un bacilo anaerobio facultativo, móvil por flagelos peritricos (que rodean su cuerpo), no forma esporas, es capaz de fermentar la glucosa y la lactosa.
Es una bacteria utilizada frecuentemente en experimentos de genética y biología molecular.

La Escherichia coli, en su hábitat natural, vive en los intestinos de la mayor parte de los mamíferos sanos. Es el principal organismo anaerobio del sistema digestivo.
En individuos sanos, es decir, si la bacteria no adquiere elementos genéticos que codifican factores virulentos, actúa como un comensal formando parte de la flora intestinal y ayudando así a la absorción de nutrientes. En humanos, la Escherichia coli coloniza el tracto gastrointestinal de un neonato adhiriéndose a las mucosidades del intestino grueso en el plazo de 48 horas después de la primera comida.

Por tanto es conveniente decir, que siempre que no haya sido modificada genéticamente, la Escherichia coli es una bacteria común pero cuenta con una gran cantidad de subtipos, la mayoría de ellos inofensivos, aunque algunas de sus cepas si son modificadas, son potencialmente peligrosas, entre ellas la famosa 0157:H7, o la casi desconocida 0104:H4, relacionada con la crisis alimentaria alemana.

Se encuentra también en aguas fecales y superficies que hayan tenido contacto con restos de materia fecal.
No acostumbra a resistir fuera de su hábitat y en ningún caso es capaz de habitar en el interior de ningún vegetal. En estos, solamente se encuentra en su superficie, por contacto de este con una colonia de E. coli.


¿Cómo llega a nosotros?

En referencia a las cepas virulentas, llegan a nosotros a través de alimentos que han sido contaminados previamente, por contacto directo o indirecto con materia fecal o aguas fecales contaminadas.
Por ejemplo, carne que ha rozado alguna superficie que ha temido contacto con contenido intestinal, o por ejemplo, una manzana sin higienizar, que hubiera tenido contacto con el suelo con restos materia fecal animal contaminada con la bacteria E. coli.
Otra forma de contaminar un alimento es por contacto del mismo con otro que este contaminado previamente con la bacteria E. coli. Por ejemplo, guardamos en la nevera carne picada contaminada al lado de una lechuga y se produce contacto; la carne la cocinamos y se vuelve inocua, pero la lechuga no y acaba provocando la toxiinfección.
Parece rocambolesco pero no lo es tanto. La higiene, correcto almacenaje y control de los residuos fecales son básicos en la prevención.


¿Qué daños nos puede causar la bacteria E. coli?

El daño causado por las cepas virulentas de la bacteria E. coli varía dependiendo de la toxina que fabrique. Pueden causar desde diarreas normales, a diarreas con descamación de la pared intestinal que cursan con heces con moco o sanguinolentas.
La bacteria E. coli más virulenta, debida a cepas como 0104:H4 ó 0157:H7, causa además de diarrea con sangre, la ruptura de glóbulos rojos y fallo renal, lo que es conocido como síndrome urémico hemolítico.
Los casos menos virulentos suelen mejorar en 5-10 días; los demás son de mal pronóstico e incluso (como ha ocurrido en Alemania) pueden llegar a provocar la muerte del infectado. Ante cualquiera de estos síntomas debería de consultar con un médico.


Brote epidémico en Alemania 2011

En Alemania en el año 2011 se informó de un gran brote epidémico producido por el serotipo enterohemorrágico Escherichia coli O104:H4.
Se trata de cerca de 3255 casos, según la OMS, con 33 fallecidos.
Se encontraron indicios de que pudiera haber surgido en una explotación alemana de brotes de soja, pero ya se han descartado como foco de la intoxicación.
Sin embargo el gobierno alemán señaló en principio a España como origen de los productos vegetales implicados en la intoxicación alimentaria, dando dos fuentes de producción en Málaga y Almería. Holanda es otro país señalado. Tras el análisis de las heces de los pacientes, se ha descartado el origen español.
Pero se desconoce el origen de la bacteria en toda la cadena hasta el consumidor, desde la producción, el transporte y la distribución, por lo que no se puede descartar la manipulación de productos en Alemania, que ha sido señalada como el país de origen de la intoxicación ocurrida en viajeros que han tocado suelo alemán.
No se ha descrito jamás, tampoco en el pasado, ningún caso en España de una infección por la bacteria implicada en el brote alemán. En España existe un posible caso de infección por el consumo de verduras frescas en Alemania.
La cepa de la bacteria E. coli aparecida en Alemania es resistente a ocho tipos distintos de antibióticos, según un equipo de investigadores chinos, que lograron secuenciar el genoma del organismo.
Los investigadores del Instituto de Genómica de Pekín han descartado antibióticos como la penicilina, las sulfamidas, la cefalotina o la estreptomicina como posible solución a la enfermedad debido a los genes que la hacen resistente.

La granja en la que, según las autoridades alemanas, se inició el brote de Escherichia coli (E.coli) cultivaba las semillas de alholva egipcias señaladas también como causa, según ha informado un portavoz del Ministerio de Agricultura en Baja Sajonia, Gert Hahne.

El Instituto Federal de Evaluación de Riesgo (BfR) ha explicado que la granja, situada en la localidad de Bienenbuettel, recibió las semillas a través de una empresa germana que también estaría vinculada con el brote menor surgido en Francia. Todas las víctimas mortales excepto una han perdido la vida en Alemania y de los 4.100 infectados, prácticamente todos vivían o habían viajado recientemente al país europeo.

Expertos del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) y de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) afirmaron ayer que las primeras investigaciones realizadas indican que "el consumo de brotes es el supuesto vehículo de infección tanto en los casos de Francia como en los de Alemania".

Se está avanzando en la determinación del origen y, por ahora, se ha demostrado que unas semillas de alholva importadas de Egipto en 2009 y/o 2010 están implicadas en ambos brotes, dijeron entonces, en alusión a una planta también llamada fenogreco y que se utiliza como hierba, como especia en muchos tipos de curry, para obtener semillas germinadas que se comen en ensaladas y como aderezo.

Sin embargo, el responsable de cuarentenas del Ministerio de Agricultura egipcio, Ali Suleiman, ha rechazado las conclusiones de los científicos europeos y ha subrayado que "la presencia de la bacteria en Egipto nunca se ha probado o registrado hasta ahora", según la agencia estatal MENA.


¿Cómo se produce el envenenamiento de E. coli que no tienen relación con carne?. Antecedentes históricos al brote alemán.

La mayoría de los casos aún tienen sus vestigios en el ganado. La bacteria E. coli reside en los intestinos humanos y de animales. Hay varias clases de E. coli; algunas son dañinas, otras no. E. coli O157:H7 se aloja en la vía gastrointestinal y excremento de vacas; no es dañino para los animales, pero es la clase que ha causado la mayoría de los brotes mortales entre los humanos. Las frutas y los vegetales pueden ser contaminados con E. coli O157 cuando tienen contacto con estiércol contaminado de vacas.

Después de un brote de E. coli en Montana en 1995, se pensó que la causa principal era lechuga infectada.
El epidemiologista del estado especuló que la lechuga fue fertilizada con estiércol contaminado o que fué regada con agua contaminada de un estanque en el cual drenaba una pastura de ganado. Un brote en Massachusetts se encontró en sidra de manzana. Los oficiales estatales creyeron que las vacas pastaron en el huerto de manzanas afectado, dejando atrás estiércol infectado con E. coli.

Las personas pueden transmitir así mismo la infección de E. coli. El CDC ha documentado varios casos de nadadores de lagos y represas quienes han resultado con envenenamiento de E. coli debido a niños que han defecado en el agua. Trabajadores de guardería, quienes han cambiado un pañal de un niño infectado y no se han detenido para lavarse las manos, y le dan a otro niño una galleta, podrían haber transmitido la bacteria.
En un reporte Government Accountability Project dice que condiciones insanas en rastros y plantas procesadoras aumenta el riesgo que los humanos tengan contacto con la mortal bacteria E. coli; por ejemplo, si la carne en una planta mugrienta cae al piso que está cubierto con excremento y sangre.

Responsabilidades sanitarias -dice Steve Drut, director ejecutivo de la Asociación Americana de Procesadores de Carne- deben ser compartidas por todos los que manejan y preparan el producto. "Si un restaurante mantiene la carne en un congelador que no es suficientemente frío, o si el supermercado pone carne cruda en un rebanador y luego comida preparada como queso, o si un consumidor va a la tienda en tiempo de verano y después para en algún lugar por alguna hora mientras las compras están en la cajuela del carro"- bueno, dice él, todos necesitan hacer su parte.

Eso comienza por reconocer los síntomas y conocer la naturaleza de la infección. La bacteria E. coli, después de ser ingerida por los humanos, se incuba por tres a cuatro días. Pero los síntomas pueden aparecer dentro de 24 horas. En cerca de un cuarto de los intoxicados, la enfermedad típicamente termina con calambres estomacales y diarrea. Para otros, la bacteria ataca los intestinos, causando diarea de sangre y algunas veces vómitos. La infeción de E. coli O157 usualmente se distingue de otras infecciones de bacterias por la ausencia de fiebre.
En esta etapa, la infección de E. coli O157 a menudo es mal dignosticada, los doctores tratan a los pacientes por apendicitis o colitis.
42 Estados han comenzado a tomar medidas para proteger a los consumidores, requiriendo que los casos de E. coli sean reportados al departamento de salud, y en algunos casos informar al público de cualquier erupción.

EDUCACION PARA LA SALUD EN TERAPIA NATURAL

¿Qué hacer en casa para mejorar la seguridad en los alimentos?

La bacteria E. coli no resiste la cocción por lo que el problema reside en alimentos que consumimos crudos, mal cocinados, productos lácteos no pasteurizados y en el contacto entre alimentos crudos y cocinados.
Por bien propio y ajeno hay que adoptar medidas que, aun siendo sencillas, habrían de acompañarnos siempre que manipulemos alimentos.

·         Utilice siempre agua potable.
·         Lávese las manos con agua y jabón antes y después de manipular alimentos.
·         Lave utensilios y tablas después de preparar cada alimento y siempre después del contacto con carnes crudas.
·         Considere utilizar toallas de papel para limpiar las superficies de la cocina y si usa paños lávelos frecuentemente a alta temperatura.
·         Separe carnes, pescados y aves de otros alimentos en su carrito de la compra y refrigerador.
·         Al cocinar carnes y en especial carne picada, asegúrese que el interior del alimento alcanza una temperatura de más de 72ºC. El interior tiene que quedar completamente hecho.
·         Consumir después de cocinarlo o si no, refrigerarlo o congelarlo. Evite colocar los alimentos cerca de fuentes de calor.
·         Refrigere o congele los alimentos dentro de un período de 2 horas. En días calurosos, refrigere o congele dentro de un término de una hora. No deje carne, pescado, aves o alimentos cocidos expuestos a temperatura ambiental.
·         Verifique la temperatura de su refrigerador, ha de ser menor de 4,4º C.
·         No vuelva a congelar alimentos una vez descongelados.


Frutas y verduras seguras frente a la bacteria E. coli

·         Elimine partes sucias y piezas deterioradas o agrietadas.
·         Lave a conciencia, con abundante agua potable y escurrir bien.
·         Sumerja durante 15 minutos en agua junto unas gotas de lejía apta para el uso alimentario, obedecer la dilución indicada por el fabricante.
·         Aclare con abundante agua y escurra.
Recuerde que la higiene alimentaria es la salud propia y la de quien le rodea por lo que se vuelve obligatoria.


Remedios naturales contra la bacteria E. Coli

Dentro de los remedios naturales contra la bacteria E. Coli podemos destacar el zumo de arándano, el extracto de semillas de pomelo y el ajo.


Actividad natural del Arándano específicamente con la E. coli

De acuerdo a investigaciones realizadas por el Consejo Consultivo de la Investigación de la Salud y Nutrición de Cítricos del Departamento de Florida, en Estados Unidos, el arándano es una de las frutas más saludables ya que contiene proantocianidinas (PACs), los cuales son compuestos naturales con propiedades antioxidantes y antiadherentes, únicas del arándano.

Las antiadherentes protegen las paredes del aparato gastrointestinal evitando que las bacterias dañinas, como el H. Pylori, se adhieran a éstas y son eliminadas del cuerpo de una forma sencilla y natural ayudando, de esta forma, a prevenir enfermedades del aparato digestivo como úlceras estomacales.
Igualmente los antiadherentes ayudan a prevenir infecciones en vías urinarias (IVU), las cuales son cada vez más comunes entre mujeres. Casi la mitad de las mujeres experimenta una vez en su vida alguna infección en vías urinarias, estas infecciones son provocadas por la bacteria E. Coli en la mayoría de los casos.

Los derivados del Arándano han demostrado resultados efectivos en el control de las infecciones urinarias. Las observaciones alcanzadas hasta el momento sólo permiten aceptar que estas sustancias acidifican la orina en base a la eliminación de ácido hipúrico y reducen la capacidad de la E. Coli a adherirse al urotelio y penetrar en el corion.
Puede ser aceptado que el Arándano pueda asociarse a los antibióticos cuando una infección urinaria ha sido comprobada y persistir en su empleo en la idea de disminuir las recidivas infecciosas.

Para la mayor parte de estos efectos, el impacto en bacterias era más fuerte cuanto más alta es la concentración del jugo de arándano o de los taninos, sugiriendo que los productos y el jugo enteros del arándano que no se ha diluido altamente puedan tener los efectos de salud más grandes.


Alternativas naturales a los antibióticos sintéticos.

Los antibióticos naturales son aquellos remedios procedentes del mundo vegetal que son capaces de inhibir el crecimiento de microorganismos o de eliminarlos. Son aquellos remedios naturales que pueden ser capaces de evitar o curar muchas enfermedades.
Los antibióticos naturales se diferencian de los antibióticos sintéticos, es decir aquellos producidos por síntesis en el laboratorio, en las siguientes características:

- No tienen efectos secundarios: En general, por ejemplo, no producen reacciones alérgicas o sensibilidad en el estómago.
- Son capaces de respetar los microorganismos beneficiosos para el organismo, por ejemplo, aquellos que son necesarios en la flora intestinal.
- No resultan peligrosos por acumulación.
- Son baratos y fáciles de conseguir.


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Entre los principales antibióticos naturales tenemos:

Ajo: ( Allium sativum) Sin duda alguna el mejor bactericida y antiviral natural. Contiene más de 20 componentes con propiedades antivirales y casi 40 componentes antibacterianos ( Aliicina, ajoeno, ácido caféico, acido ascórbico, acido clorogénico, quercitina, etc.) Todo ello lo hace ideal para el tratamiento interno de enfermedades respiratorias y del aparato excretor. Usado externamente, sirve para desinfectar y prevenir infecciones en las heridas.

Cebolla: (Allium cepa) De la misma familia que el ajo y con una composición similar la cebolla constituye otro antibiótico natural. Rica también en componentes sulfurados, ácidos y flavonoides es uno de los mejores remedios naturales para combatir procesos infecciosos del aparato respiratorio ( gripe, bronquitis, faringitis, etc...) Usada externamente, se considera un buen desinfectante.

Equinácea: (Equinácea angustifolia) La principal virtud de la equinácea radica en sus propiedades antimicrobianas en contra de bacterias, hongos y virus que la configuran como un auténtica alternativa a los antibióticos químicos. La razón de esta propiedad se debe a su capacidad para estimular el sistema inmunitario, produciendo más glóbulos blancos.

Jengibre: (Zingiber officinale) Es su capacidad antibacteriana y su tolerancia por los microorganismos necesarios en la flora intestinal ( Lactobacillus) la que le permite aumentar la riqueza de esta, eliminando microorganismos perjudiciales, como la Escherichia coli, responsable de la mayor parte de las especialmente en los niños, y muchos casos de gastroenteritis. Su poder antibacteriano es capaz de eliminar el Helicobacter pylori, una bacteria, cuyas secreciones de amoniaco con las que se protege de los jugos gástricos son las responsables de la aparición de muchas úlceras,

Tomillo (Thymus vulgaris) Son fundamentalmente los ácidos que contiene esta planta los que le proporcionan propiedades antivirales. El tomillo es un fuerte antibacteriano, no mata las bacterias pero impide que estas se multipliquen (Propiedad bacteriostática) Usada externamente es un potente desinfectante y ayuda a cicatrizar las heridas.

Romero: (Rosmarinus officinalis) El romero contiene más de 40 principios antibacterianos y más de 20 antivíricos. Usado en infusiones puede ayudar a combatir los gérmenes de las enfermedades respiratorias o intestinales. Utilizado como aromatizante en la comida impide al mismo tiempo la proliferación de gérmenes patógenos.

Menta: (Mentha ssp. ) Las mentas también son muy ricas en principios antibacterianos, especialmente indicadas para prevenir putrefacciones intestinales.

Tila: (Tilia sp.) La tila posee propiedades antivirales y antibacterianas capaces de inhibir el crecimiento de virus y bacterias, por lo que resulta muy útil su administración durante los periodos en que el organismo se ve obligado a luchar contra las infecciones. En este sentido se puede considerar esta planta como un buen antibiótico natural.


Alimentos con propiedades antibióticas

Además de los ajos y las cebollas, muy reconocidos por sus propiedades antibióticas, podemos señalar una serie de alimentos que nos ayudarán a combatir las enfermedades infecciosas. Entre todos ellos podemos mencionar:

Setas medicinales: Las propiedades antibióticas de las setas son muy destacadas. No solamente hay que resaltar el Penicillium notatum a partir del cual se sintetizó la penicilina sino que son muchas las setas comestibles o venenosas con los mismos principios. Hongos tan utilizados en la mesa como los champiñones (Agaricus bisporus) o los níscalos (Lactarius deliciosus) han demostrado tener en su composición antibióticos naturales.

Propóleo: Desde la antigüedad se han mencionado las propiedades del propóleo en la curación de las heridas u otras lesiones externas del cuerpo humano. Seguramente los antiguos debieron descubrir estas propiedades cuando se dieron cuenta que los cadáveres encontrados en el interior de los enjambres permanecían sin pudrir al estar envueltos de una substancia pegajosa.

Miel: La miel también se considera un buen alimento contra las bacterias.